Bombas Rellenas con Crema Pastelera
Las bombas rellenas son una delicia irresistible para los amantes de los postres, estos suaves y esponjosos pancitos, rellenos de una rica y cremosa crema pastelera, son perfectos para cualquier ocasión: un desayuno especial, una merienda con amigos o un capricho dulce a cualquier hora del día. En esta publicación, vamos a explorar una receta detallada para preparar bombas rellenas y compartir algunos consejos para que queden perfectas. ¡Vamos a la cocina!
Esta receta de bombas rellenas son la combinación perfecta entre una masa suave y esponjosa con un cremoso y dulce relleno de crema pastelera. Los pequeños y redondos pancitos se fríen hasta alcanzar un dorado perfecto y se espolvorean con azúcar glas, creando un contraste irresistible entre la textura exterior crujiente y el interior cremoso y sedoso.
El proceso de preparación, aunque lleva tiempo, es sencillo y gratificante, comienza con una masa enriquecida con mantequilla y huevos, que se deja levar hasta duplicar su tamaño. Luego, se forman pequeñas bolas que se fríen en aceite caliente hasta dorarse. Una vez enfriadas, se rellenan con una deliciosa crema pastelera, preparada con yemas de huevo, azúcar, leche y un toque de vainilla.
El resultado es un bocado celestial, una combinación perfecta de texturas y sabores que se deshacen en la boca. La textura final de las bombas rellenas es inigualable, por fuera, son ligeramente crujientes, mientras que el interior es suave y esponjoso.
¿Por qué no te animas a preparar estas deliciosas bombas rellenas? No sólo disfrutarás de un postre exquisito, sino que también experimentarás la satisfacción de crear algo delicioso con tus propias manos. ¡Atrévete a probar esta receta y deleita a tus seres queridos con un bocado que nunca olvidarán!
Utensilios y Equipo Necesario
Para preparar esta deliciosa receta necesitaras tener a la mano algunos utensilios y equipos de cocina, de no tener en casa alguno de estos, no te preocupes intenta buscar sustituciones que cumplan con la función en específico:
Tazón para mezclar: Necesitaras utilizar un tazón grande para mezclar y amasar la masa.
Batidor de mano o varillas: Necesario para batir las yemas de huevo con el azúcar en la preparación de la crema pastelera
Espátula o cuchara de madera: Para integrar los ingredientes y amasar la masa.
Paño de cocina: Es necesario tener a la mano un paño de cocina limpio para cubrir la masa durante el levado.
Sartén: Es indispensable tener una sartén o cacerola grande para freír las bombas. Otra opción es utilizar una freidora.
Espumadera: Para sacar las bombas del aceite caliente de manera segura.
Papel absorbente: Para eliminar el exceso de aceite de las bombas fritas.
Manga pastelera: Es necesario tener una manga pastelera con boquilla larga para rellenar las bombas con crema pastelera.
Tamiz: Para espolvorear el azúcar glas sobre las bombas de manera uniforme y decorativa.
Receta de Bombas Rellenas con Crema Pastelera
Esta receta rinde aproximadamente para 20 bombas rellenas.
Ingredientes para las Bombas Rellenas con Crema Pastelera
Para la masa:
500 gramos de harina de trigo
70 gramos de azúcar
80 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
2 huevos
10 gramos de sal
25 gramos de levadura fresca
250 ml de leche tibia
Para la crema pastelera:
500 ml de leche
100 gramos de azúcar
4 yemas de huevo
40 gramos de maicena
1 vaina de vainilla o 1 cucharadita de extracto de vainilla
Para el montaje y decoración:
Aceite para freír
Azúcar glas para espolvorear
Como Preparar Bombas Rellenas con Crema Pastelera
Preparación de la masa
Comienza disolviendo la levadura fresca en la leche tibia. Asegúrate de que la leche no esté demasiado caliente para no matar la levadura. Deja reposar durante unos 10 minutos hasta que la mezcla esté espumosa.
En un bol grande, tamiza la harina y agrega el azúcar y la sal. Mezcla bien estos ingredientes secos.
Forma un hueco en el centro de la mezcla de harina y vierte los huevos, la mantequilla a temperatura ambiente y la mezcla de levadura activada. Comienza a mezclar todos los ingredientes con una espátula o una cuchara de madera.
Cuando los ingredientes estén más o menos integrados, traslada la masa a una superficie ligeramente enharinada y amasa durante unos 10-15 minutos hasta obtener una masa suave y elástica. Si tienes una amasadora, puedes usarla a velocidad media durante unos 8-10 minutos.
Forma una bola con la masa, colócala en un bol ligeramente engrasado y cúbrela con un paño húmedo. Deja que la masa repose en un lugar cálido durante aproximadamente 1-2 horas o hasta que haya duplicado su tamaño.
Preparación de la crema pastelera
En una cacerola, calienta la leche junto con la vaina de vainilla (si usas extracto de vainilla, agrégalo más tarde). Lleva la leche a punto de ebullición y luego retira del fuego.
En un bol, bate las yemas de huevo con el azúcar hasta obtener una mezcla cremosa y de color pálido. Luego, agrega la maicena y mezcla bien hasta que no queden grumos.
Vierte lentamente la leche caliente sobre la mezcla de yemas, batiendo constantemente para evitar que los huevos se coagulen. Luego, devuelve la mezcla a la cacerola.
Cocina la mezcla a fuego medio, removiendo constantemente con una cuchara de madera o una espátula, hasta que espese y tenga una consistencia suave. Esto tomará unos 5-7 minutos. Retira del fuego, añade el extracto de vainilla si no usaste la vaina, y deja enfriar la crema cubriéndola con film plástico para evitar que se forme una costra.
Montaje de las bombas
Una vez que la masa haya levado, desgasifica presionándola ligeramente. Divide la masa en porciones iguales (aproximadamente del tamaño de una pelota de golf). Forma bolas lisas y colócalas en una bandeja de horno ligeramente enharinada. Deja reposar las bolas durante unos 30 minutos para que realicen un segundo levado.
Calienta abundante aceite en una sartén profunda o una freidora a unos 170-180°C. Fríe las bombas en pequeñas tandas, asegurándote de que no se amontonen en la sartén. Cocina cada bomba durante unos 2-3 minutos por cada lado, o hasta que estén doradas y bien cocidas por dentro. Retira las bombas con una espumadera y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Una vez que las bombas estén frías, haz un pequeño agujero en un lado de cada una con una manga pastelera equipada con una boquilla larga. Rellena las bombas con la crema pastelera hasta que estén bien llenas.
Para finalizar, espolvorea las bombas rellenas con azúcar glas para darles un toque dulce adicional.
Consejos y Trucos para unas Bombas Rellenas con Crema Pastelera Perfectas
Es crucial mantener la temperatura del aceite constante durante la fritura. Si el aceite está demasiado caliente, las bombas se dorarán por fuera pero quedarán crudas por dentro. Si está demasiado frío, absorberán demasiado aceite y quedarán grasientas.
Puedes variar el relleno de las bombas según tu gusto. Además de la clásica crema pastelera, puedes usar crema de chocolate, dulce de leche, crema de avellanas, o incluso una crema de limón para darle un toque cítrico.
Si no tienes levadura fresca, puedes usar levadura seca activa. La proporción es generalmente de 3 gramos de levadura seca por cada 10 gramos de levadura fresca.
Las bombas rellenas son mejores el mismo día que se preparan, pero si tienes que guardarlas, mantenlas en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta 2 días. La crema pastelera debe mantenerse refrigerada, así que lo ideal es rellenar las bombas justo antes de servir.
Variaciones Creativas
Bombas de canela: Después de freír las bombas, cúbrelas con una mezcla de azúcar y canela en lugar de azúcar glas.
Bombas con glaseado: Prepara un glaseado simple con azúcar glas y un poco de leche. Sumerge la parte superior de cada bomba en el glaseado y deja que se endurezca antes de servir.
Bombas con fruta: Incorpora pequeñas cantidades de puré de frutas o mermelada a la crema pastelera para darles un toque afrutado y refrescante.
Las bombas rellenas de crema pastelera son una opción deliciosa y versátil que nunca falla en impresionar. Con esta receta y estos consejos, estarás listo para crear las mejores bombas rellenas que tus amigos y familiares hayan probado. ¡Buen provecho!
