El Guacamole es una salsa versátil y saludable que puedes disfrutar como refrigerio, aperitivo o guarnición con tu comida mexicana favorita. Con solo unos pocos ingredientes frescos, y lo mejor es que puedes preparar guacamole en poco tiempo y disfrutar de su cremoso y delicioso sabor.
¡Preparar un delicioso guacamole casero es más fácil de lo que crees! Así que agarra tu delantal y manos a la obra.
Ingredientes:
– 3 aguacates maduros
– 1 cebolla pequeña, finamente picada
– 1 tomate mediano, cortado en cubitos
– 2 dientes de ajo picados
– 1/2 cucharadita de sal
– 1 limón
Preparación:
1. Comience seleccionando aguacates maduros. Deben ser de color oscuro, ligeramente suaves al tacto y ceder a una presión suave. Si están demasiado duras es que aún no están maduras. Si están demasiado blandos, están demasiado maduros.
2. Cortar los aguacates por la mitad a lo largo y quitarles el hueso. Usa una cuchara para sacar la pulpa y colócala en un tazón mediano.
3. Triture los aguacates con un tenedor o un triturador de papas hasta que estén casi suaves, quedando algunos trozos gruesos para darle textura.
4. Añade la cebolla finamente picada, el tomate cortado en cubitos, el ajo picado y una pizca de sal. Revuelve todo hasta que esté bien combinado.
5. Exprima el limón fresco sobre la mezcla, comenzando con una mitad del limón, y pruebe. Si te gusta un guacamole más picante, agrega más jugo de limón. Tenga cuidado de no agregar demasiado, ya que puede dominar los otros sabores.
6. Pruebe y ajuste el condimento según sea necesario. Puedes agregar más sal, jugo de limón o especias a tu gusto.
7. Cubra el recipiente con film transparente o transfiera el guacamole a un recipiente hermético y refrigere hasta que esté listo para servir. Es mejor comer guacamole fresco, pero puede durar hasta uno o dos días en el refrigerador.
8. Cuando esté listo para servir, revuelva rápidamente el guacamole.
Variaciones de Sabor del Guacamole:
Estos ingredientes no son tradicionales en todas las recetas de guacamole, pero pueden agregar un toque único a tu versión. Te invito a probar cualquiera de estas variaciones para que descubras cual es el mejor guacamole.
Una de las opciones que puedes utilizar es adornar con un poco de cilantro cortado en pociones pequeñas y un poco de comino molido para darle un sabor y olor extra de frescura.
Si deseas un guacamole más picante, agregue un chile jalapeño cortado en cubitos o una pizca de pimienta de cayena.
Otra opción, es agregarle un poco de mango, piña o pepino cortado en cubitos para darle un toque refrescante.
Consejos para servir y conservar:
- Para evitar que el guacamole se ponga marrón, cúbrelo con film transparente, presionándolo suavemente contra la superficie de la mezcla para eliminar las bolsas de aire.
- Si vas a preparar guacamole con anticipación, deja el hueso en el bol con la mezcla. Esto puede ayudar a ralentizar el proceso de oxidación y a mantenerlo fresco por más tiempo.
- Para obtener un guacamole más suave, licúa todos los ingredientes en un procesador de alimentos o en una licuadora. Tenga cuidado de no exagerar, ya que puede convertirse en puré.
- Sirva con totopos, verduras en rodajas o como aderezo para tacos, burritos o ensaladas.
En conclusión, hacer guacamole casero es un proceso sencillo y gratificante que puede realzar cualquier comida o merienda. Al utilizar ingredientes frescos y sabrosos, puedes crear una salsa que sea más saludable y sabrosa que las versiones compradas en la tienda. ¡Pruébalo y disfruta de las delicias del guacamole casero!